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La diarrea es una de las afecciones más comunes en las mascotas, suponiendo cerca del 30% de las visitas a los veterinarios. Aprende cómo frenarla.
PROCESO Y SÍNTOMAS
Lo habitual es que las deposiciones de tu perro o gato empiecen cambiar y a ser más blandas durante los días previos a presentar un cuadro de diarrea.
Tu mascota se mostrará más triste, cansada, disminuirá su apetito y estará molesta por los dolores.
Con la diarrea aparece uno de los síntomas más graves: la deshidratación. Esta pérdida de líquidos se puede observar en la calidad del pelaje, el cual pierde el brillo.
TRATAMIENTO
Cuando nuestra mascota sufre diarrea, los profesionales recomiendan que el animal evite el pienso seco durante 24 horas y lleve a cabo una dieta blanda (alimentos hervidos como el arroz, la pechuga de pollo y el pescado).
Además también es recomendable servir al animal el agua sobrante de hervir el arroz ya que posee propiedades astringentes.
Junto a estos consejos también existen en el mercado complementos alimentarios como Daforte que ayudan a reducir la severidad de la deshidratación, la duración de la diarrea y la frecuencia de deposiciones.
CUÁNDO VOLVER A LA DIETA NORMAL
Si observas que la consistencia de las heces y el pelaje de tu mascota mejoran, ésta recupera el apetito y se muestra más amigable, puede ser buen momento para ir recuperando su dieta habitual. Lo recomendable es ir incorporando paulatinamente pienso a la dieta blanda.
CÓMO PREVENIR LA DIARREA
Para evitar que nuestra mascota sufra diarrea, un aspecto fundamental es cuidar su alimentación con pienso de calidad y no brindarle nuestra comida. En este aspecto las golosinas o el chocolate pueden ser las causantes. Si queremos premiar a nuestra mascota es importante acudir a snacks cuya fórmula haya sido especialmente diseñada para ellos, los cuales además pueden contribuir a mejorar su salud dental y evitar la presencia de sarro.
En casa debemos prestar atención al cubo de la basura, ya que los animales tienden a investigar todo lo que allí se tira. Estos desechos pueden ser una gran fuente de bacterias y parásitos, por lo que es importante no dejarlo a su alcance.
En el caso de los perros, durante las salidas al exterior hay que estar alerta para evitar que se aproxime a deposiciones de otros animales, o que ingiera hierba, restos de palos, etc. En este sentido es recomendable brindarle al perro su pelota, hueso o juguete favorito, para poder tener certeza de que el perro se divierte con algo seguro.